Hoy, en el tren, rumbo a casa, he recordado la sensación de tener un compañero.
He visto una pareja joven, bien alimentada, rebosando felicidad
Se acariciaban, se hablaban al oído y se mimaban
Y se me ha venido a la cabeza lo que más ansio borrar, tachar de mi mente: Tu cara.
He evocado el sentimiento de tener a alguien a tu lado agarrado
Que permanece junto a tí, y puede pasarse horas acariciando cada centímetro de tu cuerpo
Sin agotarlo
La alegría que provoca ver como tu pareja camina hacia tí
Y el cosquilleo que siente uno en la barriga cuando está en camino de encontrarse con ése alguien...
La placidez de dormirse con un brazo rodeandote el cuerpo
La serenidad de despertarse a medianoche y extender el brazo, para sentir que alguien duerme a tu lado
La seguridad de que tienes para quién levantarte cada día
Alguien que llore contigo tus penas, alguien que beba contigo en los bares, alguien que te abrace cuando te sientes asustada, alguien que ría contigo, alguien que piense en tí, alguien que te diga que hoy estás muy guapa, alguien que te levante los ánimos, alguien por quien seguir existiendo, alguien por quien vivir, alguien a quien regalar algún detalle, alguien a quien provocar, a quien chinchar, alguien a quien hacer cosquillas, alguien a quien besar, alguien a quien amar...
Es díficil amar sin sentido
Sabiendo que todo acabó
Sabiendo que nada va a cambiar nada
Que todo permanecerá igual
El tiempo quizá lo va a aclarar, pero yo me concentro
Y sólo sé que tú estás aquí dentro
En mí, y no has desaparecido...
Por eso voy a intentarlo todo
Voy a comerme el mundo
Hasta que encuentre el modo de olvidarte
Porque mi amor me está consumiendo
Más allá de lo que nunca pensé....
Es como una adicción tóxica
Como una enfermedad venérea
Lo más molesto que se pueda imaginar.
Aún así, sigue siendo mi motivo
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